Según informan desde la Unión de Profesionales Trabajadores Autónomos (UPTA), la mayor parte de las licitaciones que salen, se conceden a empresas con facturaciones superiores a los dos millones de euros anuales. En lo que llevamos de 2019, solo el 42% de las adjudicaciones de licitaciones han sido para pymes o autónomos. En concreto 6.355 pequeñas y medianas empresas o trabajadores por cuenta propia. Pero, además, desde la asociación denuncian que hay 777 millones de euros que han quedado sin adjudicar mediante más de 1.600 concursos que han quedado desiertos.
Más oportunidades para pymes y autónomos en 2020
Es por ello que UPTA pretende poner en marcha un plan con el objetivo de cambiar la situación. La estrategia parte de la premisa de que la contratación pública ha de tener en cuenta a los trabajadores autónomos. Concretamente se quieren poner 2.000 millones de euros en este tipo de adjudicaciones para autónomos el próximo año. Eduardo Abad, presidente UPTA asegura que, de esta manera, son los propios adjudicatarios quienes asuman la ejecución de la mayor parte de las licitaciones en 2020. Éstas son, en su mayoría, a nivel local. Es decir, de ayuntamientos o comunidades autónomas.
“Ser el revulsivo para que, los que hasta ahora han sido adjudicatarios y no han ejercido el desarrollo de los bienes o servicios contratados, sino que los han subcontratado a autónomos y pequeñas empresas, no continúen siendo meros comisionistas del dinero público, única y exclusivamente», en palabras de Abad. Con esta iniciativa se quieren hacer un llamamiento para que estas adjudicaciones públicas sean transparentes.
Desde UPTA subrayan que si en 2020 pequeñas y medianas empresas y profesionales autónomos son la mayor parte de los adjudicatarios de las licitaciones podrían conseguir un crecimiento y/o consolidación importante para la economía. Especialmente en los pequeños municipios, donde las oportunidades son menores.