La Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (Cepyme) ha presentado el informe “Crecimiento empresarial. Situación de las pymes en España comparada con la de otros países europeos» donde se concluyen cuáles son los principales motivos que impiden el crecimiento de las empresas.
Se afirma que las empresas en España no crecen porque hay más de 100 regulaciones que lo impiden. Regulaciones de todo tipo: fiscal, laboral, contable, financiero, etc.
Entre ellos se encuentran:
- Coste laboral. En España, la suma de cotizaciones sociales y otros costes laborales hace que el coste mínimo de contratar a un empleado sea, para las empresas con entre 10 y 49 empleados, equivalente al 136% del salario mínimo. Es el porcentaje más alto de Europa tras Lituania, Francia y Bélgica.
- Subida del salario mínimo interprofesional. En los últimos cinco años ha aumentado un 41,3%. Siendo el mayor incremento entre los países de Europa más desarrollados.
- Obligatoriedad de constituir un comité de empresa cuando se tengan más de 50 trabajadores, lo que implica mayores exigencias.
- Coste del Impuesto de Sociedades. Hay muchas diferencias y particularidades de este impuesto en cada país. Sin embargo, el informe afirma que, en términos generales, en España el impuesto es más alto que en la mayoría de Europa. Concretamente el cuarto más caro, tras Malta, Alemania y Francia.
- Tipo máximo de IRPF. España también se sitúa entre los más altos. Lo que dificulta la atracción del talento en las empresas.
- Las cotizaciones sociales que deben pagar las empresas por sus empleados son las terceras más altas de toda Europa.
- Elevada carga de trámites burocráticos.
Tejido empresarial pequeño
Ya sabemos que el tejido empresarial de España es pequeño. Que la mayoría de las empresas españolas sean pequeñas perjudica tanto a los empresarios como a la sociedad en general.
España es el quinto país europeos con empresas de menor tamaño, con menos de 6 trabajadores. Se sitúa tras Portugal, Italia, Bélgica y Países Bajos.
En el informe se explica que con empresas más grandes la productividad y los salarios aumentarían. Cepyme indica en un comunicado que “El crecimiento del tamaño empresarial no es tan solo una problemática de la empresa española, sino que debe convertirse en un asunto de Estado, ya que afecta a la competitividad de todo el país».