Cerca de 1.300 millones de personas en todo el mundo, es decir, aproximadamente una de cada seis, enfrentan algún tipo de discapacidad. De manera más específica, alrededor del 27 % de la población global experimenta problemas visuales. Van desde dificultades menores, como ciertos tipos de daltonismo, hasta ceguera total. En España, desde el año 2002, se han implementado diversas leyes. El objetivo es garantizar la accesibilidad en servicios en línea y aplicaciones para todos los usuarios. A pesar de estos esfuerzos, el «Informe de accesibilidad 2023 WCAG» revela que un alarmante 96 % de los sitios web analizados no cumplen con los estándares de accesibilidad. Excluyendo así a 1.300 millones de personas de acceder a los productos y servicios ofrecidos por estas empresas.
El 28 de junio de 2025 representa la fecha límite estipulada por el Acta Europea de Accesibilidad para que las empresas cumplan con los requisitos legales en materia de accesibilidad. En respuesta a esta necesidad, Paradigma Digital, una empresa tecnológica española, se ha dedicado a analizar los errores más comunes y a proporcionar consejos y herramientas que faciliten la adopción de prácticas de accesibilidad en el desarrollo web.
Errores de accesibilidad en la web
Entre los errores más frecuentes se destacan la falta de contraste de color suficiente (83,6 %), la carencia de descripciones para las imágenes (58,2 %), enlaces vacíos (50,1 %), falta de etiquetas asociadas a los campos de entrada (45,9 %), botones sin contenido (27,5 %) y la omisión del idioma en las etiquetas HTML (18,6 %). Luis Calvo de Paradigma señala que estos errores reflejan una falta de consideración hacia la accesibilidad en el proceso de desarrollo, pero resalta que son problemas fácilmente solucionables.
Por sectores, el comercio minorista encabeza la lista de errores de accesibilidad web con un 72,9 %. Seguido de noticias/información con un 66,9 %, fintech/banca con un 50,27 % y las páginas gubernamentales y administrativas con un 32,45 %. Sorprendentemente, las páginas web de las administraciones públicas, que por ley deben ser accesibles, también presentan deficiencias. Lo que podría resultar en sanciones por parte de la Unión Europea o la pérdida de subvenciones de Europa.
Para prevenir estos errores, Paradigma Digital recomienda a quienes buscan iniciarse en la accesibilidad utilizar la Web Accessibility Initiative (WAI), que ofrece una amplia documentación para formar tanto a desarrolladores como a diseñadores. Y, proporciona acceso a una librería de componentes completamente accesibles. Además, sugieren el uso de herramientas de prueba como Axe o Pa11y. Además, las herramientas de desarrollo de los navegadores, como las DevTools en Chrome, ofrecen utilidades para verificar la accesibilidad.
Aunque existen numerosas herramientas automatizadas que facilitan el proceso, solo el 30 % de los errores de accesibilidad se detectan de manera automática. Por lo que siempre es necesario combinar estas herramientas con pruebas manuales.
Luis Calvo de Paradigma destaca la importancia de abordar estos problemas. La accesibilidad es un requisito esencial para cualquier aplicación. Ya que las barreras de acceso tienen un impacto directo en los resultados económicos. La accesibilidad no debe ser responsabilidad únicamente del equipo de desarrollo, sino que requiere la implicación y responsabilidad de toda la empresa.