Las pequeñas y medianas empresas españolas han logrado crecer durante el primer semestre de 2022. Según los datos ofrecidos en el informe ‘Salud financiera de la pyme española en el primer semestre de 2022’ elaborado por la plataforma de fintech para pymes Trinios, la facturación de las pymes en España ha crecido 2,3 millones de euros de media durante el último año.
En total han sido 350.000 euros más en comparación con los 1,96 millones promedio de los doce meses previos. Lo que supone un incremento interanual de más del 18%. Estos datos reflejan una recuperación generalizada de esta parte del tejido empresarial español durante el último año.
Otra información importante que refleja el informe es que el número de clientes de las pymes ha crecido. En total, un 25% más que en el mismo periodo del año pasado.
Aunque se ha demostrado que ha habido una clara tendencia positiva, lo cierto es que podría haber sido mucho mejor. Hasta un 11% de las pequeñas y medianas empresas han visto aumentar las deudas en sus ventas.
Según Julián Villalba, Corporate CRO en Trinios, “en el último año las pymes españolas han logrado facturar más, sobreponiéndose a la difícil coyuntura macroeconómica derivada del impacto de la guerra o la crisis de materias primas. Esto ha sido posible gracias a que muchas de ellas han diversificado su cartera de clientes, pero también con un contexto en el que había un gran flujo de dinero y financiación cuyo origen está, en muchas ocasiones, en los préstamos concedidos por acreedores institucionales”.
¿Qué previsiones hay sobre la facturación de las pymes para el resto de 2022?
Desde Trinios no se muestran muy pesimistas de cara al futuro de las pymes. En los próximos meses se producirá el vencimiento de los créditos ICO y se reducirán los fondos de las ayudas europeas. Además, la subida de la inflación tendrá consecuencias negativas para las empresas.
Estas previsiones también se basan en la tendencia al alza del ratio de deuda. Las ventas no cobradas en los últimos doce meses han crecido. En febrero de 2022 correspondía al 30% y en junio ha aumentado a 33%
En este sentido, Julián Villalba explica que “si estas previsiones se cumplen, muchas pymes buscarán métodos de financiación alternativos con los que asegurar de manera más rápida y sencilla su salud financiera a corto plazo”.