Guatemala es hoy en día una economía en crecimiento. Este país cuenta con un importante sector hostelero y con pocos intermediarios, lo que lo convierte en un país con muchas oportunidades para las pymes del vino. Al tratarse de un producto muy internacional, las pymes que se dedican al vino encuentran en el extranjero muchísimas oportunidades de negocio.
El vino es un producto internacional que enamora tanto dentro como fuera de las fronteras. Alemania, Reino Unido o Estados Unidos son algunos de los destinos tradicionales de las pymes vitivinícolas. Sin embargo, recientemente se han incorporado algunos países que se presentan como una gran oportunidad, entre los que destaca Guatemala.
Según los datos del ICEX España Exportación e Inversiones, Guatemala es uno de los países que más crecimiento está teniendo. En 2018 registró un PIB de 82.676 millones de dólares, lo que lo situó como el país con mayor Producto Interior Bruto de toda Centroamérica. Esto se debe en parte a la situación de la población guatemalteca. El 78% es menor de los 40 años y el 56% tienen menos de 24 años.
Además, Guatemala tiene una accesibilidad que lo convierte en un país idóneo para la exportación de vino. Según un informe de Doing Business, realizado por el Banco Mundial, Guatemala ocupa el puesto número 97 en cuanto a acceso. Esto, junto con la espléndida situación de las pymes españolas que decidieron exportar, lo ha convertido en el país idóneo para la venta de vino.
País turístico gastronómico y sin intermediarios
Guatemala también se ha convertido en un país con un alto turismo gastronómico. Por ello, grandes cadenas hoteleras y de restauración lo han elegido como el país para instaurar sus negocios.
Además, cada vez son más las cadenas de supermercados y grandes superficies han comenzado a evitar los intermediarios a la hora de conseguir los productos. En su lugar, contactan de forma directa con las empresas que importan los productos. Por ello, tanto las pequeñas como las medianas empresas están de enhorabuena, ya que pueden vender directamente sus productos al país en cuestión sin necesidad de contar con un intermediario, por lo que los beneficios son superiores. Esto, junto con el aumento del PIB de Guatemala y su excelente accesibilidad ha hecho que muchas empresas españoles estén pensando en abrir nuevos mercados en el país.