Obtener rentabilidad y un buen retorno de la inversión es el objetivo de cualquier empresa. Sin embargo, 2020 ha supuesto un antes y un después en la gestión de miles de pequeños negocios. La digitalización ha pasado a ser una necesidad de estas empresas. Se ha convertido en un instrumento que puede permitirles alcanzar la rentabilidad que necesitan.
Así lo asegura la CEO de Datisa, Isabel Pomar, quien insiste en la necesidad de planificar adecuadamente las inversiones y minimizar los riesgos, algo que será «determinante» para apuntalar cualquier cambio.
Para conseguir la transformación de sus negocios, las pymes tendrán que determinar si están preparadas para realizar cambios en su organización. Pomar insiste en que los cambios organizativos implican la transformación digital, no solo desde el punto de vista de los procesos, sino también, desde el punto de vista cultural. «Es importante impulsar las buenas prácticas que ayuden a avanzar más deprisa», afirma.
Estas empresas también tendrán que determinar si dispone de las competencias y habilidades digitales esenciales para poder abordar un cambio en el modelo digital. En caso de poder hacerlo, añade, se deberá invertir en herramientas y averiguar si existen los conocimientos necesarios para explotarlas.
Por otro lado, las empresas deberán contar con apoyo tecnológico para llevar a cabo el proceso de digitalización. En ese sentido, será importante que dispongan de alguien que se ocupe de que el sistema funciona correctamente. Aquí será también especial poder averiguar si hay evolución del mismo de manera periódica para poder corregir errores y mejorar.
La CEO de Datisa también ha señalado que la transformación digital «es un elemento prioritario para impulsar el negocio de una pyme». Ella recomienda tener en cuenta que los clientes de las pymes ya son digitales, por lo que hay que ser competitivos y una manera de hacerlo es gracias a la digitalización.
Para ella, la automatización es una de las principales claves porque «ayuda a las pequeñas y medianas empresas a ser más resilientes y flexibles, lo que les permite adaptarse mejor a las circunstancias. Y, eso, en los tiempos que corren, es imprescindible”.
Asimismo, advierte que las empresas que tienen un crecimiento superior al resto son aquellas que han apostado por la digitalización.