¿Te gustaría abrir un gimnasio por tu cuenta? La mayoría de los profesionales del fitness sueñan con abrir su propio centro algún día, pero demasiados no siguen adelante con ese sueño porque o no entienden bien los pasos que hay que dar en el proceso, o piensan que nunca podrían permitirse la inversión.
En este artículo, vamos a repasar la información que necesitas para hacer realidad el sueño de ser propietario de un gimnasio.
Cómo montar un gimnasio
Selecciona el local
Elegir el local es una de las decisiones más importantes que vas a tomar. En un mundo ideal, querrás un local con mucho tráfico peatonal en una ubicación céntrica, pero este tipo de locales puede ser difícil de conseguir. También tienes que tener en cuenta que supondrá la mayor parte de los costes operativos. El alquiler, el agua, la electricidad y la calefacción se comerán tu flujo de caja con regularidad. Además de la ubicación, tienes que tener en cuenta la cantidad de obras que necesita el local. Los distintos tipos de gimnasios requieren diferentes diseños, equipos e instalaciones, por lo que debes tenerlo en cuenta al hacer tu elección.
Consulta el siguiente enlace para saber exactamente cuánto cuesta montar un gimnasio, dependiendo de su tamaño. En este mismo enlace podrás consultar las medidas de seguridad necesarias en cada caso. Pues según el tamaño del gimnasio que quieras montar tendrás que prestar atención a la disposición de las salidas de emergencia y a su número, pero también las demás medidas de seguridad.
Licencias y seguros
Es vital que cuentes con la Licencia de Actividad de Gimnasio, para la cual habrás tenido que desarrollar previamente un Proyecto donde expliques los aspectos de la actividad, cómo influirá en el resto de vecinos, medidas de seguridad y muchos elementos más.
Además necesitarás otra serie de documentos como los posibles permisos de obras necesarios para acometer renovaciones y adaptaciones en el local, la declaración de Impacto Ambiental que supondrá el nuevo negocio y las medidas de seguridad. Además también necesitarás un Plan de Prevención de Riesgos Laborales y distintos seguros de responsabilidad civil y profesional por si ocurre algún accidente en el gimnasio.
Equipamiento: comprar o alquilar
Decidir si comprar o alquilar equipos de gimnasio puede ser desalentador, pero es una de las decisiones más importantes que tomarás como propietario de un negocio de fitness.
- Comprar tu propio equipo de gimnasio te permite personalizarlo, te proporciona un activo y puedes venderlo para compensar los costes de actualización. Pero tiene sus inconvenientes, como el elevado precio de compra inicial y los costes de mantenimiento y conservación.
- Alquilar los equipos puede ofrecer una mayor flexibilidad y ayudarte a posicionarte por encima de la competencia. El leasing te permite reducir el coste inicial y te da flexibilidad para actualizar con más frecuencia. Pero a largo plazo, puede costarte mucho más que la compra.
Promociona tu gimnasio
Por último, piensa en cómo vas a dar a conocer tu gimnasio para atraer clientes. Aquí tienes algunos consejos:
- Crea un sitio web: crea un sitio web que recoja tus servicios, tu experiencia y que sea visualmente interesante. Asegúrate de que tu sitio está optimizado para los motores de búsqueda. Así te asegurarás de que tu negocio ocupe un lugar destacado cuando alguien busque un gimnasio o centro de entrenamiento local.
- Crea perfiles en las redes sociales y en sitios de reseñas: crea páginas y cuentas de empresa en Facebook, Twitter, Google e Instagram. Pide a los clientes que te etiqueten en sus fotos y que publiquen reseñas. Y publica regularmente actualizaciones, noticias y ofertas especiales.
- Fomenta la fidelidad de los clientes: utiliza boletines y ofertas por correo electrónico para mantener el contacto con los clientes. Asegúrate de que tu gimnasio sea un lugar cómodo, limpio y agradable de visitar.
Esperamos haberte ayudado a aclarar las dudas que tuvieras sobre cómo abrir tu propio gimnasio con estos sencillos pasos.