Según el informe “Pyme España 2018”, elaborado por la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), las pequeñas y medianas empresas en España se muestran optimistas pensando en 2019. El 41% de las pymes en nuestro país cree que sus ventas aumentarán el próximo año. Solo el 2,8% se muestra pesimista, y cree que venderá menos en 2019, según se extrae del mismo documento.
Las pymes más pequeñas, las más confiadas
De hecho, son las empresas más pequeñas y jóvenes las que mejores expectativas tienen. Aquellas con menos de 10 empleados y menor recorrido en el mercado son las que consideran que el año que viene conseguirán crear empleo y mejorar los datos de ventas.
Concretamente, es el 21,4% de las pymes las que afirman que el empleo mejorará y aumentará al final de 2019. Mientras que solo el 4,2% considera que se registrará un descenso. La diferencia entre ambos pone de manifiesto la clara tendencia optimista.
Los problemas de las pequeñas y medianas empresas
Sin embargo, sigue existiendo un problema que continúa lacrando la actividad de las pequeñas y medianas empresas, y que ralentiza su crecimiento y desarrollo. El acceso a la financiación. Según el informe citado, solo el 34,2% de las empresas con menos de 250 empleados en plantilla han intentado solicitar financiación a entidades de crédito. Estas pymes recurren a su autofinanciación, o directamente no invierten porque piensan que no recibirán el préstamo.
La transformación digital es fundamental para el desarrollo del negocio, pero la falta de acceso a la financiación frena el desarrollo de las pymes. Sí bien es cierto, el 83% de las pymes cuentan con una página web corporativa, solo el 40% tiene actividad en las redes y menos del 20% vende online.
Resulta paradójico, ya que estas son las cualidades vitales de una pyme exitosa. Su promoción a través de internet y la posibilidad de vender sus productos o servicios a través de la web es lo que permite a las pymes expandirse y crecer.
Esperemos que este optimismo de las empresas se alimente con la facilidad a la hora de recurrir a la financiación.