Las 10 características del emprendedor con éxito son un conjunto de habilidades que forman parte de una personalidad capaz de asumir riesgos desde un punto de vista responsable que se basa en la confianza en sí mismo.
¿Te gustaría descubrir cuáles son? ¿Cumples el perfil? ¿Encuentras alguna habilidad que necesites adquirir?
Características de un emprendedor exitoso
1. Pasión
Descubrir cuál es la principal motivación que te mueve por dentro, y utilizar toda tu energía, entregarte en cuerpo y alma para conseguir los objetivos y metas que te propones es fundamental en una actitud emprendedora. La vocación supone el leitmotiv de toda profesión, gracias a la pasión se consigue superar todos los obstáculos e imprevistos que puedan surgir cuando planteas pilotar un negocio desde cero.
2. Pensamiento creativo
No solamente de diseño y dibujo se trata la creatividad. Montar una empresa requiere inventiva, ser capaz de identificar una buena idea que explotar, y que aporte servicio a la sociedad, forma parte de la originalidad con la que funciona nuestra mente. La capacidad de encontrar soluciones creativas es fundamental para tener éxito como emprendedor.
3. Conocimientos y formación
Es muy importante adquirir una formación adecuada para emprender bien un negocio. La capacidad de aprendizaje y la formación continua para un emprendedor es primordial. Adquirir las capacidades adecuadas a través de un buen plan de estudios es una decisión que hay que tomar a la hora de emprender. Por ello, una formación completa sobre cómo manejar una empresa resulta clave. Además, ahora es posible estudiar a distancia Administración de Empresas, lo que te permite avanzar a tu propio ritmo, con autonomía, estés donde estés y ahorrar tiempo. Lo más acertado suele ser escoger una Universidad con experiencia en esta modalidad como la Universidad Isabel I donde obtendrás una formación multidisciplinar, aprendiendo a desarrollar una visión estratégica, la adaptación al cambio, la autodisci04plina y el rigor profesional entre otras.
4. Responsabilidad. Sensatez y seriedad
Asumir el reto de levantar un proyecto desde cero, exige una determinación, ser consecuente con las decisiones que se toman y asumir responsabilidades. Y a la vez asegurarse de que las cosas salen adelante, aun cuando no esté todo perfecto, es mejor un trabajo hecho que un trabajo no entregado.
5. Capacidad para adaptarse a los cambios
Las cosas no siempre salen del modo que esperamos por mucho que se planifiquen. Otras veces surgen imprevistos imposibles de prever. El mundo digital en el que nos movemos está en continua evolución y cambio. La necesidad de ser flexible impera a la hora de emprender. Poder adaptarse a los cambios que vienen con agilidad evitará quedarse anclado y superar barreras.
6. Optimismo
Gozar de una actitud positiva es una característica muy valiosa para ser emprendedor. Ayudará a cumplir con el resto de cualidades, ya que, con una visión optimista, la mente permanece más abierta y dispuesta a los cambios y nuevas ideas.
7. Visión
La visión es uno de los pilares fundamentales en un emprendedor, no solo basta con identificar los objetivos, ir un paso más allá y adelantarse a las siguientes fases en las que pueda crecer su empresa será un plus para anticiparse a la toma de decisiones y evitar al máximo los imprevistos que puedan aparecer.
8. Coraje
Asumir riesgos, tomar decisiones que puedan implicar un gran cambio en la manera de hacer las cosas, para emprender hace falta ser valiente. Tener capacidad de lidiar con la incertidumbre, con la seguridad de haber estudiado y valorado muy bien las consecuencias positivas y negativas de emprender nuevos retos y tomar grandes decisiones.
9. Liderazgo
La necesidad de un buen líder ante un proyecto emprendedor es clave. No solo consiste en dar instrucciones sobre lo que hay que hacer. Para liderar un equipo hay que comunicar de una manera brillante las acciones que quiere llevar a cabo la empresa para lograr obtener lo mejor del equipo. Para liderar con éxito también hay que bajar al barro cuando sea necesario.
10. Persistencia
Aprender de los errores, volver a intentarlo y persistir en nuestros objetivos es una característica que debe ir intrínseca a un emprendedor.