Los profesionales autónomos pueden acceder a una serie de ayudas por contratar a sus hijos en prácticas. Se trata de una bonificación poco conocida y con bastantes dificultades de acceso. Por ello, vamos a explicarla detenidamente.
Los trabajadores por cuenta propia pueden contratar en prácticas a sus hijos. Se trata de un contrato legal por el que, además, se puede optar a una bonificación de hasta 700 euros. Sin embargo, poder optar a estas ayudas no es tarea sencilla. Hay que cumplir una serie de requisitos que te exponemos a continuación.
Requisitos para acceder a la bonificación
- Lo primero, es que el contrato en prácticas debe pasar a ser indefinido. Además, este proceso de contratación debe realizarse por relevo o sustitución, en caso de que el autónomo anticipe su edad de jubilación.
- El trabajador por cuenta propia no puede tener más asalariados a su cargo. Es decir, debe ser el primero que contrate. Y no puede ser un autónomo societario, sino que debe ser un autónomo bajo en RETA, y no con una sociedad constituida.
- El trabajador que se vaya a contratar ha de tener menos 45 años, y no vivir con el autónomo ni estar a su cargo. Hay una excepción para esto y es que si el hijo que va a ser asalariados tiene menos de 30 años, en cuyo caso sí podrá vivir con el autónomo.
- Como suele ocurrir con todas las ayudas, el profesional autónomo debe estar al corriente y al día de los pagos y obligaciones.
- Además, es necesario no haber sido nunca excluido de beneficios para aplicar programas de empleo ni nada parecido. Tampoco puede hacer tenido sanciones al respecto.
En caso de cumplir con los objetivos anteriores, el profesional autónomo, puede acceder a una cuantía de 500 euros al mes en caso de ser varón, y llegar a los 700 euros mensuales de ayuda, en caso de que su hija sea una mujer.