Según el Barómetro del I Trimestre de 2025 publicado por la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), el año ha comenzado con un panorama incierto para los autónomos en España.
Perspectivas económicas y facturación de los autónomos en 2025
El informe revela que el 42% de los autónomos mantuvo su negocio y el 31,1% lo mejoró en 2024. Sin embargo, un tercio prevé una evolución negativa en 2025 debido al contexto económico actual. Solo un 19% se muestra optimista respecto al crecimiento económico este año.
Contratación y costes laborales
El aumento de los costes laborales es una de las principales preocupaciones. Casi dos tercios de los autónomos no contratarán en 2025 por este motivo, y un 8% se verá obligado a despedir. El presidente de ATA, Lorenzo Amor, considera inasumible la subida del salario mínimo interprofesional (SMI) propuesta por el Ministerio de Trabajo, que implicaría un incremento de 50 euros brutos mensuales, alcanzando los 1.184 euros. Según sus estimaciones, esto supondría un coste adicional de más de 3.000 euros por empleado al año, sumando la reducción de jornada prevista por la CEOE.
Morosidad y acceso a financiación de los autónomo en 2025
La morosidad sigue siendo un problema significativo, afectando al 45,3% de los autónomos, más de diez puntos porcentuales respecto al dato registrado en junio de 2023. En cuanto al acceso a financiación, el 42,3% de los autónomos afirma no requerirla, mientras que el 21,2% solicitó y obtuvo crédito con éxito. Otro 23% no ha solicitado financiación debido a su incapacidad de endeudamiento.
Este panorama de la situación actual que viven los autónomos (que nunca ha sido una situación fácil) refleja la necesidad de implementar medidas que alivien la carga fiscal y administrativa de este amplio e importante colectivo. Medidas que de alguna manera, fomenten la contratación y mejoren la confianza en la economía nacional.