Según el informe Observatorio de morosidad del segundo trimestre de 2024 elaborado por CEPYME, el índice de morosidad en las facturas de ventas a plazo (IMFVP) se redujo por tercer trimestre consecutivo. Se sitúa en 45,4 puntos, un 15,2% menos que en el segundo trimestre de 2023. Se trata del nivel más bajo desde septiembre de 2022.
Evolución de la morosidad en facturas por sectores económicos
Desde la segunda mitad de 2023, la evolución del IMFVP ha mostrado diferencias entre los cuatro principales sectores económicos. En el segundo trimestre de este año, la construcción experimentó un aumento considerable, mientras que la industria y los servicios tuvieron caídas moderadas, menores que el promedio general. Sin embargo, el sector agroalimentario registró su mayor reducción en dos años y medio.
Con una base de 100 puntos para el promedio del periodo 2014-2019, el Índice de Morosidad de Facturas de Venta a Plazos (IMFVP) general, con 45,4 puntos, es el más bajo desde el tercer trimestre de 2022. De manera similar, el IMFVP industrial, tras tres trimestres de caídas consecutivas, alcanzó 34,7 puntos. Dentro del sector industrial, las ramas de papel y artes gráficas, así como otras manufacturas, presentan la mejor situación en comparación con sus datos históricos. Estas dos ramas son las únicas que han registrado cuatro descensos interanuales consecutivos, situando sus índices en 23,4 y 8,9 puntos, respectivamente. Esto significa que la morosidad en el subsector de papel y artes gráficas es ahora un 23,4% del promedio registrado entre 2014 y 2019.
El sector agroalimentario ha registrado cuatro caídas consecutivas en su Índice de Morosidad en las Ventas a Plazo (IMFVP), alcanzando los 33,4 puntos, el nivel más bajo desde septiembre de 2021. En contraste, el sector de la construcción ha visto un aumento en su IMFVP por segundo trimestre consecutivo. Llegando al 34,8%, con un índice de 75,1 puntos, el más alto desde diciembre de 2020.
Por otro lado, el sector de los servicios, tras ocho incrementos consecutivos, retrocedió un 5,4%, situándose en 56,4 puntos. Dentro de este sector, las actividades profesionales destacaron con un aumento interanual del 89,8% y un IMFVP de 103,8 puntos, siendo la única rama que supera las 100 unidades. Esto indica una morosidad superior al promedio de 2014-2019.
Evolución por comunidades autónomas
En el segundo trimestre, el Índice de Movimiento de Fondos de las Ventas Públicas (IMFVP) solo creció en cinco autonomías, la cifra más baja desde marzo de 2022. Asturias lideró con un aumento del 75,1%, seguida por La Rioja (18,2%) y Madrid (17,2%). También hubo incrementos en Navarra (7,9%) y Extremadura (3,4%). Navarra es la única autonomía con seis aumentos interanuales consecutivos.
Entre las regiones con mayor disminución en su Índice de Morosidad en las Ventas a Plazo (IMFVP), destacan Cantabria (-65,3% interanual), el País Vasco (-58,9%) y Ceuta y Melilla (-58,8%). Solo Galicia, Murcia y Ceuta y Melilla presentan cuatro caídas interanuales consecutivas en su IMFVP.
En todas las autonomías, la morosidad es menor que el promedio de 2014-2019. Baleares tiene la peor situación relativa con un IMFVP de 89,4 puntos, seguida por La Rioja (78,9) y la Comunidad Valenciana (62,5). Ceuta y Melilla registran el IMFVP más bajo (14,1), seguido por Murcia (21,8) y Castilla y León (24,2).
Al repetir el ejercicio de asignar un valor de 100 a la media nacional para comparar el Índice de Morosidad en las Ventas a Plazo (IMFVP) entre las diferentes comunidades, se identifican tres autonomías que superan en al menos un 30% el promedio de España: Andalucía (135,6), Comunidad Valenciana (133,2) y Asturias (132,2). En el lado opuesto, hay tres territorios cuya morosidad es menos de la mitad del promedio: Cantabria (41,5), Navarra (48,7) y Ceuta y Melilla (49,5).