¿Estás pensando en emprender y te gustaría hacer las gestiones para el alta de forma correcta y ahorrando para que la inversión sea la mínima? Existen una serie de pautas a tener en cuenta para que, a la hora de darte de alta como autónomo, simplifiques tiempo y gastos. A continuación te contamos cómo hacerlo.
Mira la posibilidad de recibir paro único. Se permite a aquellos emprendedores que previamente estuviesen trabajando y demuestren que van a destinar todo lo que tienen acumulado de desempleo a crear un nuevo negocio o a incorporarse a una sociedad con menos de un año de antigüedad. Esta consulta se realiza en la Seguridad Social y, de tener derecho, podrían ingresar en cuestión de mes y medio, al menos el 60% de lo que te correspondiese de paro.
Hay casos en los que la cuantía sería del 100% ¿Cuáles? ser varón menor de 30 años o mujer menor de 35 años. También si tienes una minusvalía igual o superior al 33% o si destinarás todo el importe como capital social de una sociedad mercantil de nueva creación.
El segundo paso es darte de alta en Hacienda. Para ello es obligatorio presentar la declaración censal y los modelos 036 o 037. Tienen el mismo efecto, solo que el segundo es la versión simplificada válida para casi todos los autónomos.
Ante este mismo organismo deberás anotar el epígrafe del Impuesto de Actividades Económicas (IAE). Es distinto en cada profesión en función de si se realiza una actividad empresarial, profesional o artística. Existen guías en Internet para comprobar qué epígrafe te pertenece según tu oficio.
Ahora toca decidir el modelo de cotización con el que aportarás tus impuestos al Fisco. Analiza en qué consiste cada uno porque, en función de la actividad que vayas a emprender, te pueden servir para saber desde el primer momento cuánto deberás aportar con independencia de lo que realmente ganes.
Existen algunas profesionales en las que el modelo de tributación –objetiva o directa- es obligatorio, pero en la mayoría tú mismo decides por cuál cotizar. La diferencia entre ambos es la manera de calcular los rendimientos de la actividad.
Abonar en función de los ingresos reales
En la estimación directa, pagas a Hacienda en función del beneficio real. Para ello se contabilizarán cada tres meses los ingresos y se descontarán los gastos. Al resultado se le aplica el IVA. Esta modalidad es recomendable para quienes empiezan, ya que el rendimiento neto puede ser muy variable y si, durante los primeros periodos tienen pérdidas, te ahorrarás abonar este impuesto.
El régimen de módulos o estimación objetiva no tiene en cuenta el beneficio real, sino una estimación de lo que se puede ganar según la actividad, los gastos o los miembros en plantilla. Es obligatorio en los casos en los que los beneficios netos de la empresa superen los 450.000 euros o 300.000, o en caso de dedicarte a una actividad agraria.
Los módulos se calculan para todo el año y se regularizan en la declaración de la renta. ¿Sus ventajas? A principios del año fiscal ya sabes cuánto vas a abonar a la Agencia Tributaria. También reducen las gestiones administrativas que se deben hacer durante el año.
Declarar para ahorrar
Cuando te das de alta en Hacienda cumplimentas una casilla con tu dirección. Ahí debes poner la de la oficina si es que vas a realizar una actividad en la que tengas que estar abierto al público o tu vivienda en caso de que trabajes desde casa. Es muy importante en este segundo caso porque, si la propiedad o el alquiler de donde resides y que será tu oficina está a tu nombre, podrás deducirte el 30% de los gastos que tengas en el hogar a la hora de hacer la declaración del IVA.
Si vas a estar abierto al público no olvides solicitar en tu Ayuntamiento una licencia de apertura. El trámite puede demorarse, por lo que recomendamos que realices esta gestión tras el alta en Hacienda.
Otras cuestiones a tener en cuenta ante Hacienda una vez dado de alta es que toca el momento de realizar todas las inversiones asociadas a la puesta en marcha de tu empresa. Hazlo así y no al revés, los expertos de SAGE recuerdan que es el único método a seguir para poder desgravarlas cuando realices tu correspondiente declaración de IVA.
También en relación con los gastos deducibles, ten en cuenta que si vas a realizar compras o ventas intracomunitarias –es decir, con otros países de la Unión- debes estar dado de alta en el ROI. Es el Registro de Operadores Intracomunitarios sirve para deducirte el IVA en cualquier operación internacionales.
Una vez hayas realizado todas estas gestiones en Hacienda tienes un mes para cumplimentar el alta en la Seguridad Social como autónomo. Se hace presentando el modelo TA0521 más la fotocopia del DNI y la del alta en Hacienda. Es entonces cuando debes solicitar expresamente tu deseo de percibir la tarifa plana en la cuota de autónomos. Te corresponde si eres nuevo emprendedor o, desde tu última fecha de alta en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos, han pasado más de dos años. Gracias a esta ayuda, abonarás sólo 50 euros al mes durante un año.