El Gobierno de España ha introducido una serie de permisos familiares destinados a facilitar la conciliación laboral y familiar. Estas medidas, recogidas en el Real Decreto Ley 5/2023, incluyen tres permisos principales:
- Permiso parental de 8 semanas. Este permiso permite a los progenitores disfrutar de hasta ocho semanas, continuas o discontinuas, para el cuidado de sus hijos o hijas hasta que estos cumplan ocho años. Aunque inicialmente no estaba remunerado, una sentencia reciente ha reconocido la obligación de retribuirlo, lo que ha llevado a la Comisión Europea a expedientar a España por no cumplir con la normativa comunitaria en este aspecto.
- Permiso retribuido de 5 días. Los trabajadores pueden disponer de cinco días al año para atender a familiares de hasta segundo grado o convivientes en casos de accidente o enfermedad graves, hospitalización o intervención quirúrgica sin hospitalización que requiera reposo domiciliario. Este permiso es remunerado y busca proporcionar apoyo en situaciones críticas de salud de seres queridos.
- Permiso retribuido de hasta 4 días por causas de fuerza mayor. Este permiso permite a los empleados ausentarse del trabajo por motivos urgentes relacionados con familiares o personas convivientes. Se concede por horas y puede acumularse hasta un total de cuatro días al año.
Otras modificaciones en permisos familiares
Además de estos permisos familiares, la Ley de Familias contempla otras modificaciones significativas. Por ejemplo, se elimina el término «familia numerosa», que será reemplazado por «Ley de Protección a las Familias con mayores necesidades de apoyo a la crianza». Esta categoría incluirá a las familias previamente reconocidas como numerosas y ampliará su alcance a otras situaciones familiares que requieren apoyo adicional.
Otra novedad es la creación del Observatorio Estatal de Familias, adscrito al Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030. Este organismo tendrá funciones de análisis, investigación y propuesta de actuaciones en materia de familias. Su objetivo, adaptar las políticas públicas a las necesidades reales de los hogares españoles.
Estas iniciativas reflejan el compromiso del Gobierno por fortalecer las políticas de apoyo a las familias. Promueven una mayor equidad y facilitando la conciliación entre la vida laboral y personal de los ciudadanos.