Las empresas españolas vuelven a situar la internacionalización como una de sus prioridades estratégicas, pero advierten que el ritmo de crecimiento exterior depende en gran medida del apoyo fiscal y del acceso a financiación adecuada. Así se desprende del último informe del Observatorio sobre la internacionalización, elaborado por la Cámara de Comercio de España junto a varias organizaciones empresariales y consultoras de referencia.
El estudio revela que un 62 % de las compañías considera imprescindible reforzar el apoyo fiscal y los instrumentos financieros para poder competir en mercados cada vez más exigentes. Este grupo señala que sin esos mecanismos de respaldo es difícil sostener procesos de expansión que requieren inversión elevada, preparación técnica y una gestión compleja de riesgos.
Barreras y oportunidades
Además de la necesidad de un mayor apoyo fiscal, la encuesta identifica barreras que frenan a las empresas, especialmente a las pymes. Un 47 % menciona la burocracia y los trámites administrativos como el principal obstáculo, mientras que un 37 % reclama programas específicos que faciliten su crecimiento internacional.
En cuanto al contexto global, el informe apunta que el 75 % de las empresas teme una desaceleración económica internacional y un 73 % observa con preocupación el auge del proteccionismo. A esto se suman las disrupciones logísticas, que un 33 % identifica como un riesgo real en el corto plazo. Pese a ello, muchas compañías detectan oportunidades en los nuevos acuerdos comerciales de la Unión Europea y en mercados como China y Vietnam, que ganan relevancia estratégica.
El apoyo fiscal, determinante para crecer en mercados estratégicos
Estados Unidos continúa siendo uno de los destinos prioritarios para las firmas españolas. Aunque algunas consideran que los aranceles suponen un reto significativo, un 32 % planea incrementar su presencia en este mercado. Latinoamérica también figura como territorio clave: más de la mitad de las empresas prevé aumentar allí su actividad en los próximos meses.
El informe evidencia que, para capitalizar estas oportunidades, el apoyo fiscal y el refuerzo de los programas financieros serán determinantes. Tres de cada cuatro empresas esperan aumentar sus ventas internacionales, pero coinciden en que ese crecimiento solo será sostenible si se consolidan medidas que acompañen su expansión global.

