Sandra Cerrada, Presidenta de AJE Madrid, lidera desde hace tres años una de las asociaciones más veteranas y activas del ecosistema emprendedor español. AJE Madrid, que celebró su 40º aniversario el año pasado, ha evolucionado de ser un espacio de encuentro a convertirse en un verdadero agente vertebrador del emprendimiento en la región.
Sandra aporta un liderazgo estructurado y estratégico que combina rigor, sostenibilidad y cercanía. En esta entrevista, reflexiona sobre los retos y oportunidades del ecosistema madrileño, las necesidades de los emprendedores, la internacionalización de la ciudad como hub de emprendimiento y el papel de AJE como puente entre talento, instituciones y mercado.
- AJE Madrid cumplió el año pasado 40 años. ¿Cuál dirías que es hoy el rol de la asociación en un ecosistema emprendedor que ha cambiado radicalmente desde 1984?
AJE Madrid ha pasado de ser un espacio de encuentro a convertirse en un agente vertebrador del ecosistema emprendedor. Hoy nuestro rol no es solo acompañar al emprendedor en el inicio, sino estar presente en todo su ciclo de crecimiento, conectándolo con financiación, instituciones, conocimiento y mercado. En un entorno mucho más complejo y global, AJE actúa como puente: entre generaciones, entre lo público y lo privado y entre el talento y las oportunidades reales.
- Durante tus tres años al frente, ¿qué necesidades has detectado en los jóvenes empresarios de Madrid que quizá no estaban cubiertas?
He detectado tres grandes necesidades: claridad, acompañamiento real y acceso. Muchos emprendedores saben hacer muy bien su producto o servicio, pero necesitan apoyo en áreas clave como finanzas, estructura legal, escalabilidad o toma de decisiones estratégicas. Además, existía una brecha entre el discurso y la realidad: hacía falta un acompañamiento más práctico, más cercano y más continuo. Y, por último, acceso: a contactos, a financiación y a instituciones que muchas veces parecen lejanas.
- Muchos emprendedores llegan desde otras comunidades o incluso otros países, especialmente Latinoamérica. ¿Qué barreras encuentran y cómo les acompaña AJE en ese proceso?
Las principales barreras son administrativas, culturales y relacionales. No siempre es sencillo entender el marco normativo, el funcionamiento del mercado o cómo generar confianza y red en un entorno nuevo. Desde AJE Madrid trabajamos para que se sientan parte del ecosistema desde el primer día, ofreciéndoles orientación, espacios de networking, mentorías y conexión con instituciones y empresas. Nuestro objetivo es que Madrid sea una ciudad de oportunidades reales, no solo de llegada.
- ¿En qué momento se encuentra el programa de incubación y cuál es la visión a futuro?
Estamos en una fase de consolidación y evolución. El programa de incubación ya no se centra únicamente en el inicio del proyecto, sino en ayudar a construir empresas viables, sostenibles y escalables. La visión a futuro es clara: convertirlo en un programa de referencia que combine formación, mentoría, acceso a financiación y conexión con el mercado, adaptado a las distintas etapas del emprendimiento.
- ¿Qué tipo de negocio o sector está creciendo más rápido dentro de AJE actualmente?
Estamos viendo un crecimiento muy fuerte en servicios profesionales avanzados, tecnología aplicada, sostenibilidad, salud y bienestar, así como en proyectos con impacto social. Cada vez más emprendedores combinan rentabilidad con propósito, y eso está marcando una tendencia clara dentro de la asociación.
- ¿Crees que Madrid se está consolidando como un hub de emprendimiento internacional o aún falta recorrido?
Madrid está avanzando de forma muy sólida y ya es un referente, especialmente para Europa y Latinoamérica. Tiene talento, calidad de vida, infraestructuras y una administración cada vez más alineada con el emprendimiento. Aun así, queda recorrido: debemos seguir mejorando en agilidad administrativa, acceso a financiación y atracción de talento internacional. El potencial es enorme.
- Llegaste con experiencia en derecho y finanzas, dos áreas clave para cualquier negocio. ¿Cómo ha influido tu formación en tu modelo de liderazgo?
Mi formación me ha llevado a un liderazgo muy orientado a la estructura, la sostenibilidad y la toma de decisiones con criterio. Entiendo el emprendimiento no solo desde la ilusión, sino desde la viabilidad a largo plazo. Eso me permite aportar orden, rigor y estrategia, sin perder de vista la parte humana y creativa que todo proyecto necesita.
- ¿Qué ha sido lo más difícil de dirigir una asociación tan grande y diversa?
Sin duda, equilibrar intereses y realidades muy distintas. AJE Madrid reúne emprendedores de sectores, tamaños y momentos vitales muy diferentes. El reto está en construir una visión común sin perder esa diversidad, y en tomar decisiones que aporten valor al conjunto, incluso cuando no siempre son cómodas.
- ¿Qué alianzas institucionales consideras estratégicas para los próximos años?
Las alianzas con administraciones públicas, universidades, escuelas de negocio, entidades financieras y grandes empresas son clave. Especialmente aquellas que apuesten por la formación financiera, el acceso a financiación y la transferencia de conocimiento. Creemos mucho en la colaboración como motor de crecimiento.
- ¿Qué consejo le darías a un emprendedor sin red de contactos?
Que no espere a tenerla para empezar, porque la red se construye caminando. Que se acerque a asociaciones como AJE, que pregunte, que se forme y que pierda el miedo a pedir ayuda. Nadie emprende solo, y rodearse bien desde el principio puede marcar la diferencia entre sobrevivir o crecer.

