La compañía mantiene de forma ininterrumpida desde 2012 la certificación IFS Food, que avala el cumplimiento de exigentes requisitos de calidad y seguridad alimentaria en la elaboración de sus productos cárnicos. Bajo este estándar, Emcesa garantiza la seguridad y la calidad de todo su surtido, que incluye productos cárnicos, embutidos, elaboraciones mixtas y platos preparados, todos ellos envasados con elevados niveles de protección y control
Emcesa, compañía toledana con casi 40 años de trayectoria en el sector cárnico, ha logrado nuevamente la conformidad con el estándar internacional IFS Food, reforzando la solidez y el elevado nivel de control de su sistema de producción. La reciente auditoría externa ha confirmado que la compañía continúa cumpliendo los requisitos de seguridad alimentaria, integridad del producto y gestión eficiente establecidos por esta norma de referencia internacional.
El resultado obtenido representa un paso más en la estrategia de la compañía, centrada en la excelencia y la mejora continua. En este marco, Emcesa tiene implantado un procedimiento específico para desarrollar y consolidar una sólida cultura de seguridad alimentaria en toda la organización, lo que contribuye a garantizar que los principios de calidad y seguridad formen parte del trabajo diario de cada área. Con más de una década manteniendo esta certificación, Emcesa demuestra su capacidad para adaptarse a los requisitos técnicos y regulatorios de un mercado cada vez más exigente.
La evaluación IFS Food ha analizado los procesos de la planta de Casarrubios del Monte (Toledo), desde la recepción de materias primas hasta la expedición del producto final. La auditoría ha revisado en detalle los procedimientos implantados, poniendo el foco en aspectos clave como la trazabilidad, el control higiénico-sanitario y la verificación interna del sistema de calidad, confirmando que Emcesa mantiene un modelo de gestión alineado con los requisitos del estándar IFS Food. Este reconocimiento avala la capacidad de Emcesa para ofrecer alimentos seguros con un sistema de gestión plenamente alineado con las exigencias de la distribución europea.
Innovación, inversión y equipo humano: los pilares del resultado
Durante los últimos años, la compañía ha incrementado de forma notable su apuesta por la digitalización y la automatización, implementando nuevas herramientas para la supervisión de parámetros críticos, modernizando líneas de producción y reforzando el laboratorio interno para un control analítico más completo.
A ello se suma el papel del equipo humano, que recibe formación específica y continua para garantizar que los procedimientos de calidad se integren en el día a día. En palabras de Javier Mancebo, director general de Emcesa: «La renovación del certificado IFS no es un trámite, sino una confirmación de que hacemos las cosas bien, con seriedad y vocación de mejora constante».
Crecimiento sostenido y proyección internacional
El robusto sistema de calidad ha impulsado la expansión de Emcesa tanto en el mercado nacional como en el exterior. La empresa continúa desarrollando nuevas líneas de productos —incluidas referencias orientadas a consumidores que buscan mayor contenido proteico o alternativas de conveniencia listas para cocinar—, apoyándose siempre en procesos seguros, uniformes y auditados.
En materia de bienestar animal, Emcesa cuenta con los sellos IAWS y Welfair™, que certifican que sus productos proceden de animales criados y sacrificados bajo estrictos estándares de bienestar, conforme a protocolos como Welfare Quality y AWIN, y en línea con la normativa comunitaria en esta materia.
Además del estándar IFS Food, Emcesa dispone de un Sistema de Autocontrol Específico (SAE) certificado para la exportación a países terceros con requisitos diferentes a los intracomunitarios, lo que le permite acceder a nuevos mercados fuera de la Unión Europea y consolidar su proyección internacional sobre la base de la seguridad, la trazabilidad y el cumplimiento normativo.
